Mauricio Diagama Durán (Consultor, docente, investigador, conferencista internacional)
En un artículo anterior (Geopolítica: un Instrumento de Análisis) se dijo que la geopolítica puede entenderse, como un conjunto de ideas, o como un método de análisis, Y que su aplicación se llama geoestrategia.
También se afirmó que busca entender los conflictos sociales que se dan dentro de un espacio determinado. Esto porque permite analizar la relación entre poder, recursos involucrados e intereses de los actores que están cobijados por él.
Además que facilita explicar las relaciones y la historia de cada espacio, bajo la perspectiva humana, el Estado y las cosas. Y que permite comprender las condiciones económicas como factores de conflicto y generadoras de paz o violencia.
Ahora, en este segundo artículo, se precisarán los conceptos que sustentan tales afirmaciones.
Poder
Existen infinidad de interpretaciones y conceptos asociados al poder y en concreto al poder político. Pero en resumen es la capacidad de imponer la propia voluntad sobre la conducta ajena (Weber), por lo que para la geopolítica la clave es que el espacio ocupado o disputado por los actores con tal capacidad, resulta fundamental, para entender cómo se mezclan sus intereses y los recursos.
Así se pueden explicar las relaciones de poder, tal como lo muestra el Gráfico No. 1
Espacios y Recursos
La geopolítica asume como variable independiente el espacio donde se realizan las acciones humanas, y dentro del cual se ejerce el poder. Es además la fuente primaria de riqueza por la existencia de recursos. Así que el espacio es una cápsula de tres dimensiones, con límites precisos, pero con formas físicas diversas, tal como lo muestra el Gráfico No.2.
Aquí es claro que ningún espacio sometido al poder es infinito, por lo que el mismo hombre le fija límites artificiales, para restringir la acción del poder de otros.
La zona, donde están esos límites fijados por los hombres, se llama frontera
Con estos conceptos se llega así a los de espacios en disputa, espacios cercanos y espacios lejanos.
El espacio en disputa se define como el heartland o el centro de la relación entre actores que se pelean algo que contiene recursos vitales, estratégicos o simbólicos para uno o varios de ellos.
Los espacios cercanos y lejanos constituyen el entorno, donde hay otros actores con intereses propios, que pueden tomar decisiones o adelantar acciones acerca del espacio en disputa.
En este caso, los recursos son activos que se pueden usar para producir beneficio propio y cuya posesión es factor de riqueza. Por tanto pueden ser útiles, estar disponibles para su uso, ser finitos, y ser importantes para la economía.
Existen los recursos naturales y los artificiales (el hombre interviene en su desarrollo). Los naturales, provienen del espacio en disputa, son independientes al hombre mismo, y su existencia no depende de este.
Dichos recursos pueden ser vitales, como el aire limpio, el agua dulce o la comida, por lo que los espacios donde existen, son estratégicos, tales como selvas, ríos, bosques o páramos.
O pueden no ser vitales, pero ser estratégicos, como el petróleo, el carbón o las piedras preciosas.
También existen los recursos artificiales y los simbólicos.
Ahora bien, dado que los recursos generan riqueza, su tenencia, transformación y empleo, es esencial para los actores, tales como el Estado, la familia, las empresas, etc.
Y como la riqueza sustenta el poder, entonces los recursos son valiosos económica y políticamente hablando.
Así que cuando un recurso se califica como estratégico, se pretende asociarlo de manera directa con el mantenimiento, incremento o mejoramiento de la riqueza (El Presidente de Nestlé afirma por ejemplo que el agua no es un recurso vital para el conjunto de la humanidad y que por lo tanto debe ser tratada como un producto más).
Actores
Un actor puede ser individual o social. Este último se caracteriza porque se estructura a partir de actores individuales, que comparten visiones comunes, valores, y formas de actuar y de hacer más o menos comunes. Aquí el liderazgo interno, está enfocado en la defensa de los intereses colectivos y en el logro de los objetivos del grupo.
Pues bien, en el mundo de hoy, existen múltiples actores y por tanto el campo de las relaciones internacionales se ha ampliado, tal como se muestra en la gráfica No 3.
Esto sucede porque en los siglos anteriores, el peso social, económico y político radicaba casi exclusivamente en los Estados, y por eso su papel era muy preponderante. Solo que ahora una empresa multinacional puede manejar presupuestos corporativos superiores a los presupuestos públicos de un país y tener intereses repartidos por el mundo entero.
Existe también la burocracia internacional, representada en las OIGs, que puede tener tanto o más poder que un alcalde o una autoridad regional. Y las ONGs, o las personas mismas, enfrentadas por intereses y recursos.
Aquí el actor importante es aquel que se comporta como actor económico y que por lo tanto expresa y defiende intereses asociados a la riqueza individual o colectiva. Y si cada actor adelanta acciones o toma decisiones que pueden afectar, beneficiar o ir en contra de los intereses de los demás actores, surgen los conflictos.
Así que el papel de los Estados es actuar como el actor más poderoso, para darles seguridad a todos los demás, y hacer que los conflictos se tramiten pacífica y legalmente.
Intereses
El tema de los intereses está asociado en este enfoque, con las conveniencias, aspiraciones y necesidades particulares de los actores personales, los grupos sociales, el Estado o la sociedad en general.
No son solo deseos ni sueños, pues ellos están vinculados con objetivos, bienes o asuntos reales, sobre los que el actor tiene algún tipo de capacidad para adquirirlos, mantenerlos o incrementarlos. Y en defensa de ese interés es capaz de actuar con las herramientas que le posibiliten su desarrollo, obtención, conservación o aumento.
Los actores los entienden además como propios y únicos, y si son del orden económico, el actor económico respectivo, los asume como que constituyen la razón principal de su riqueza.
País, nación y Estado
País es un concepto político – espacial, que parte de la idea que dentro de un espacio delimitado, viven personas organizadas por algún tipo de poder, con unos recursos y unos intereses más o menos comunes.
Nación es un concepto sociológico, referido al grupo de personas con lazos, identidades y formas culturales relativamente comunes, que pueden ocupar uno o varios países.
Y Estado, es un concepto jurídico, administrativo y político, que se refiere a la manera como se organizan las personas para su supervivencia y convivencia comunes, estableciendo normas, autoridades e instituciones, dentro de un espacio común.
De lo anterior se desprende, que no todos los países son uninacionales, ni tienen un solo estado. Ni todas las naciones están en un solo país ni se rigen por un solo Estado. Y mucho menos que todos los Estados son nacionales.
Autor: Mauricio Diagama Durán (Consultor, docente, investigadorr y conferencista internacional (Argentina, México, Perú, Rusia, Venezuela, entre otros países) y Nacional, en temas asociados con geopolítica, relaciones internacionales, administración pública, administración educativa, gerencia empresarial internacional, y negocios internacionales. Bogotá, Colombia)