Mauricio Diagama Durán (Consultor, docente, investigador, conferencista internacional)
El mundo, que camina con tropiezos, hacia una nueva globalización, presenta tensiones derivadas de la combinación de temas internacionales, con formas de pensar y actuar nacionales y locales.
Estas tensiones se han traducen en conflictos, algunos violentos, y en amenazas o riesgos para las personas y gobiernos.
Se requieren entonces, nuevos enfoques o instrumentos, para entender, explicar y proponer acciones para la seguridad internacional y nacional. O que se empleen ideas distintas frente a la solución de los problemas internacionales.
En este contexto, resurge la geopolítica cómo un instrumento de análisis contemporáneo.
Aquí están sus bases.
LA EVOLUCIÓN
A finales del siglo antepasado, nació un enfoque teórico que revolucionó la acción de las potencias europeas, pues entre otras ideas planteó el espacio vital y le dio mucha importancia al territorio y a los recursos que allí estaban. De allí su vínculo natural con las fuerzas militares.
Luego, algunos afirmaron que tales ideas constituían una ciencia autónoma dentro de las ciencias sociales y otros las incluyeron como parte de las relaciones internacionales o la ciencia política comparada. Y así comenzó la discusión sobre su carácter.
Pero la realidad es que existía una confusión entre una estructura teórica (geopolítica como un conjunto de ideas), una metodológica (geopolítica como método de análisis) y su aplicación práctica (geoestrategia).
Más tarde, durante el siglo XX, y especialmente durante el régimen nazi, esos principios se usaron para justificar los propósitos de expansión. Y de esta forma, nació una interpretación de la geopolítica, que afirma que esta promueve los intereses colonialistas y el comportamiento agresivo de los países o de quién los exprese o sugiera para su uso.
Pero después de terminada la II Guerra Mundial, fueron apareciendo otros enfoques, métodos, perspectivas de estudio o visiones acerca del espacio y el hombre.
Surgió el campo de las ciencias geográficas y del espacio, como respuesta a lo limitado de la geografía tradicional. Y también se multiplicaron las ciencias humanas y sociales.
Por eso, en el marco de la guerra fría, regresó la geopolítica y aparecieron nuevas ideas, escuelas, y estrategas civiles y militares.
Hoy las cosas han cambiado bastante. Las globalizaciones, el surgimiento de China, la tecnología masiva, entre otros hechos, han provocado que la geopolítica se haya convertido en un gran instrumento de análisis. Y el mundo dispone de importantes centros de pensamiento geopolítico, que buscan analizar casos y hechos, para ofrecer interpretaciones y generar respuestas a las autoridades.
Gráfico 1
Así que ahora la geopolítica es más un enfoque o una mirada, que tiene características de un método de estudio adecuado para entender los conflictos sociales que se dan dentro de un espacio determinado.
La razón es que permite entender el poder, usando la perspectiva del espacio que ocupa el hombre, los recursos involucrados y los intereses de los actores que están cobijados por él.
Además porque si los intereses son particulares a cada actor, entonces aparecen los conflictos, que pueden hacerse violentos. Por tanto, es posible explicar cómo los conflictos se generan, resuelven, mantienen o terminan dentro de unas dimensiones espaciales.
LAS PREMISAS
– Hay una relación estrecha entre hombre, poder y Estado en todos sus niveles; con las formas de espacio en que el hombre vive.
– El espacio y todo lo que hay dentro de él, se constituyen en variables independientes en la ecuación del desarrollo, aunque el hombre los modifique con su accionar.
– El espacio adopta muchas formas naturales, independientemente del hombre y los pueblos que las ocupen. Por tanto la visión del ambiente, reducida al suelo (territorio) o al agua (salada – mar, dulce – ríos, lagos, lagunas) es importante pero no refleja toda la relación hombre – ambiente. Todo espacio es una cápsula de tres dimensiones que tiene anchos, altos y profundos, estructurados con materias distintas como la tierra, el agua o el aire.
– El hombre en su vivir, crea y adopta formas artificiales de espacio, a las que llama, por ejemplo, países, regiones, departamentos, estados o provincias, y les fija límites o fronteras espaciales, para marcar su poder frente a los demás. Estas formas artificiales están sujetas a la acción humana y por tanto son dinámicas, según sea el poder que las acoge.
– El Estado nacional y sus formas de organización geográfica, interna o externa, son creaciones humanas y por tanto, no son absolutas, por lo que pueden ser modificadas, según el poder se exprese en ellas.
– Los recursos de un país o de cualquiera de esas formas artificiales de espacio, pueden ser vitales, estratégicos o simbólicos, según la importancia que tengan para quienes los poseen, usen o requieran. Y pueden estar dentro de ese espacio o no estarlo. Así que mientras aquellos los desean y tratan de obtenerlos, los otros procurarán no perderlos o aumentarlos. Los recursos naturales, como el agua, el aire, los bosques, la selva o los minerales, son los más importantes, al tener que ver con la vida misma.
– Muchos conflictos surgen por los recursos que se encuentran en un espacio dado. Algunos serán violentos y otros no. Pero son naturales, son de interés público, y se requiere una cultura para su resolución.
– Finalmente, sólo desde el poder es que se resuelven, mantienen o acaban los conflictos.
LAS PREGUNTAS
¿Cuál es el factor dinamizador o la variable independiente: el ser humano o el escenario? ¿El hombre o el terreno donde se asienta?
¿Por qué los hombres deciden entrar en conflicto por un espacio?
¿Por qué los recursos que se asocian a un espacio, son vitales, si en ocasiones no están relacionados con la integridad humana?
¿Qué hace que los intereses se vuelvan individuales frente a esos recursos?
¿Por qué, si no pueden explotarse bien los recursos, se protegen, incluso con la vida misma, antes que compartirlos o cooperar?
LOS ELEMENTOS CONSTITUTIVOS
Como se ve, el enfoque geopolítico se centra en identificar los espacios, los actores e intereses, y los recursos (sobre todo los naturales) como claves de los conflictos, muchos de ellos violentos. Por tanto, analiza el poder, las relaciones y la historia de cada espacio, bajo la perspectiva humana, el Estado y las cosas. (Gráfico 2)
Así que permite visualizar la relación entre seguridad global, nacional y local. Y además facilita comprender las condiciones económicas como factores de conflicto y generadoras de paz o violencia.
GRAFICO 2
MÉTODO GEOPOLÍTICO
También muestra a los países con intereses particulares, compatibles o no con otros, y cómo tratar de alcanzarlos, es propio de ellos. Porque los recursos son la base de la riqueza y competir por ellos es parte de su desarrollo.
Aquí los intereses son la razón de ser de la política, pues la lucha por el poder, se explica al obtener o conservar la riqueza y defender los intereses de quién ostenta ese poder.
Y si bien la lucha por el poder debiera ser pacífica; este enfoque muestra que se usan la fuerza y la violencia como medios para la defensa de los intereses particulares.
Así la geopolítica aclara que los conflictos, la violencia y el uso de la fuerza son parte de la realidad humana.
Autor: Mauricio Diagama Durán (Consultor, docente, investigadorr y conferencista internacional (Argentina, México, Perú, Rusia, Venezuela, entre otros países) y Nacional, en temas asociados con geopolítica, relaciones internacionales, administración pública, administración educativa, gerencia empresarial internacional, y negocios internacionales. Bogotá, Colombia)